Los efectos inesperados de los desastres naturales pueden afectar a las poblaciones de todo el mundo, amenazando el desarrollo sostenible y la resiliencia. Sin embargo, los impactos de estos eventos, como las precipitaciones extremas o la sequía, afectan desproporcionadamente al mundo en desarrollo, donde sus habitantes a menudo no están aseguradas y viven y trabajan en condiciones que los hacen vulnerables a los desastres naturales. Esto puede causar desafíos económicos y ambientales significativos si no se toman medidas preventivas o de mitigación a tiempo. Para reducir los riesgos de los desastres naturales y crear resiliencia climática, los encargados de tomar decisiones están utilizando las observaciones de la NASA para desarrollar productos de seguros basados en índices y proteger a los clientes de bajos ingresos en América Central, especialmente en la región conocida como el Corredor Seco.